Las nubes me acompañan y camino volando
si tuviera que caerme todos los días,
por ver esto lo haría.
Y levantarme,
y ver tantos soles verdes,
y gotas de agua,
y colores.
Las nubes me acompañan.
Somos tan pequeños,
y somos lo que siempre pensamos que fuimos
y mientras más lo pensamos, menos vivimos.
La vida que es de la montaña,
que a ella va y en ella habita.
Sus sonidos son el agua en tantas formas,
Las luces verdes la alumbran y la adornan.
Y yo me siento tan pequeña,
cuando cambio y vuelvo a nacer.
Otra vez, mi primera vez.
Cuando me cae el agua
y mi tronco se desvanece.
Y sigo viva,
y camino por la montaña.
Camino por la montaña,
aunque ahora parezca asfalto.
María Fernanda Núñez Sarmiento.
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